Los intentos de renovación pedagógica en la Escuela de Veterinaria de Córdoba en los años treinta
Los múltiples cambios que se produjeron al comienzo de los años treinta del pasado siglo supusieron para la sociedad española y también para la universidad, la esperanza de alcanzar los niveles de los más países desarrollados de entonces.
Las escuelas de veterinaria no fueron ajenas a ello. La fuerte influencia de Gordón Ordás iba a facilitar que los centros docentes veterinarios acogiesen pronto y con gran esperanza los cambios que eran tan necesarios para unos estudios de mucha tradición y herederos de aquellos albéitares, ilustres, pero también mal considerados.
En el caso de Córdoba se daba la feliz coincidencia de que al frente de su escuela estaba D. Rafael Castejón y Martínez de Arizala que sintonizaba con las directrices que emanaban del gobierno de Madrid desde la Dirección de Ganadería y el Ministerio de Industria y Comercio
Ejemplo de esos cambios que se entendían debían introducirse eran los planes de estudio de los títulos de veterinaria, también llamados Plan Gordón, y los intentos de renovación pedagógica. Una de las actividades escolares más significativa dentro de esos programas pedagógicos era la organización de viajes escolares que, durante pocos años porque quedaron abortados por la Guerra Civil, se hicieron a Málaga (1932), al pantano del Guadalmellato (1932), a Sevilla, Huelva y Jabugo (1933), a Portugal (1933) y a Marruecos (1934).
A estos viajes escolares que se realizaron entre los años 1932 y 1934, ambos incluidos, asistían alumnos del último curso de carrera en grupos de unos 25 alumnos. Junto a ellos les acompañaban un grupo de profesores entre los que se encontraban de forma constante D. Rafael Castejón, que en aquellos años era el director del Centro y el Prof. Martín Ribes, autor del conjunto de películas que constituyen este patrimonio filmográfico. La financiación de los viajes era compartida por la Escuela y los propios alumnos, pero en algunas ocasiones eran becados por el Ministerio que aportaba para la escuela una bolsa de viaje. Se nombró un administrador a estos efectos. Las buenas relaciones entre la Escuela y las distintas instituciones anfitrionas de los lugares que visitan queda patente a través de las imágenes recogidas y por diversos documentos de cortesía y reconocimiento que fueron intercambiados con motivo de las visitas.
Para la organización previa de los viajes, se constituían comisiones de alumnos que se encargarían de la toma de notas de todos los acontecimientos de los itinerarios y que quedaban recogidas en unos cuadernos de viaje que posteriormente eran entregados a cada uno de los alumnos participantes. El alumno encargado de la redacción de la Memoria del a Marruecos fue D. Rafael Sánchez de C. Urbano. En la actualidad se conservan algunos de estos cuadernos en manos de los familiares descendientes de quienes fueron alumnos partícipes del viaje, tal es el caso del Veterinario D. Rafael Calero Carretero, que custodia el cuadernos de notas del viaje a Marruecos que realizara su padre D. Rafael Calero Villarreal cuando era estudiante de Veterinaria.
Igualmente, se constituyó otra comisión para la labor fotográfica, si bien las filmaciones en películas de las excursiones fueron tarea del Profesor D. José Martín Ribes quien era Director del Laboratorio Fotográfico de la Escuela y que, a su vez, había sido designado como profesor encargado de la organización de las excursiones de los estudiantes. A él mayormente le debemos que hoy día se pueda exponer al público las imágenes con todos los detalles de lo que encontraron en aquellos viajes.
Los viajes pueden diferenciarse en: aquellos que eran visitas o salidas de corta duración a un único lugar próximo a la Escuela, y aquellas excursiones de varios días para conocer lugares o monumentos de interés turístico y cultural conjuntamente con centros de interés veterinario tales como explotaciones ganaderas, mercados, industrias alimentarias, centros de remonta, depósitos de sementales, yeguadas, centros de investigación, clínicas veterinarias, mercados, etc.