El ceiA3 participa en un proyecto europeo para optimizar la producción agrícola a través del cuidado del suelo
El proyecto europeo SOILCARE tiene como fin que la agricultura europea continúe siendo competitiva y sostenible. Para ello desarrollará una metodología que evalúe el rendimiento de los cultivos en múltiples niveles, en 16 lugares de estudio, repartidos por toda Europa El presupuesto de este proyecto, cuya vigencia es de cinco años, es de 6.999.993 euros
El proyecto europeo SOILCARE persigue el cuidado del suelo para lograr una producción rentable y sostenible de los cultivos. En él trabajan los investigadores de la Universidad de Almería, pertenecientes al ceiA3, Julián Cuevas, Juan José Hueso, Fernando del Moral y Emilio Galdeano. El director de la OTRI, Oficina de Transferencia de Resultados de Investigación, de la Universidad de Almería, Fernando Diánez, ha sido el encargado de presentar este proyecto aprobado en el marco del programa H2020, “en el que participa un número importante de investigadores de la UAL y Las Palmerillas junto con un consorcio con 29 socios. Para la UAL es importante la captación de recursos a través de los proyectos europeos H2020. Actualmente trabajamos en nueve de ellos con un importe de 1.250.000 euros”.
El objetivo último de SOILCARE es lograr un impacto significativo desde el nivel local al europeo, para mejorar la producción agrícola de modo que la agricultura europea continúe siendo competitiva y sostenible a través de la mejora del suelo dedicado a los cultivos. La idea es que tanto las técnicas agronómicas como el riego, el abonado, la fertilización o el manejo de plagas y enfermedades se hagan de modo que se incremente la calidad del suelo.
De la sostenibilidad de este proyecto ha hablado el investigador Julián Cuevas, “nosotros optamos por orientarnos hacia la sostenibilidad, una imagen que a veces no se percibe en el resto de Europa, y este proyecto es fiel reflejo de esa apuesta”. Además, buscan “acabar influyendo en la política agraria a través de nuestro consorcio que funcionará como portavoz de lo que se puede hacer para recomendar actuaciones a todo nivel: agronómico, ambiental, pero también político. De modo que Europa sea consciente de que tiene que hacer algo para que técnicas de cultivo que se conocen como sostenibles y rentables, sean adoptadas por el usuario final, en este caso el productor de frutas y hortalizas”. Para el investigador, Fernando del Moral, es importante el hecho de que a través de estas prácticas sostenibles el productor “no solo se beneficia económicamente sino que también obtiene beneficios sociales, culturales, agronómicos y medioambientales”.
A través del proyecto SOILCARE se analizarán los beneficios e inconvenientes de los sistemas de cultivo seleccionados cubriendo aspectos agronómicos, socioeconómicos y políticos relevantes. Se utilizará información existente en la literatura y trabajo experimental para desarrollar una metodología común que evalúe el rendimiento de los cultivos en múltiples niveles en 16 lugares de estudio (entre ellos Almería), que cubren diferentes pedo-climáticas y condiciones socioeconómicas en toda Europa.
Los resultados de las parcelas experimentales se analizarán a nivel europeo para extraer conclusiones generales acerca de la aplicabilidad de los sistemas de cultivo evaluados y de sus resultados en lo referente a la mejora del suelo considerando la rentabilidad y sostenibilidad, incluyendo en el estudio la evaluación de las barreras de diferente naturaleza (agronómicas, económicas, socioculturales y políticas) que han venido frenando su adopción a nivel de campo.
El presupuesto de este proyecto, cuya vigencia es de cinco años, es de 6.999.993 euros. En él participan universidades, centros de investigación, asociaciones, agricultores, industria y pymes, entre otros, de 18 países europeos.